domingo, 7 de febrero de 2010

APOSTOLADO EN VIDA ASCENDENTE

SOBRE EL APOSTOLADO EN VIDA ASCENDENTE

PUNTOS DE PARTIDA

PRIMERO: Pienso que el apostolado tiene por objeto llevar almas a Dios. Sabemos que hay muchas clases de apostolado,-de oración, atender al prójimo, el apostolado del testimonios etc- Todos buenos y necesarios para atender las diferentes necesidades de la sociedad. Todo apostolado va dirigido al otro, no a nosotros.
SEGUNDO: Pienso que la Iglesia siempre ha enseñado la doctrina de Cristo, pero en cada época la ha expuesto de forma diferente para adaptarla a las necesidades de la época.
TERCERO: Pienso que las necesidades de los tiempos modernos requieren presentar una religión creíble a la luz de los conocimientos de hoy, que son diferentes y muy superiores, a los de hace tan solo sesenta años cuando nos formábamos los mayores.
CUARTO: Si estamos atentos a las llamadas de la Iglesia vemos que se nos dice que muchos de los que han abandonado la Iglesia -y son muchísimos en estos últimos años- es debido a que tienen una imagen equivocada de Dios, de Cristo y de la Iglesia, y a su escasa formación religiosa.
CONCLUSION: Estas consideraciones me llevan a pensar que, sin despreciar ningún tipo de apostolado, hoy urge recuperar la imagen de Dios, de Cristo y de su Iglesia. ¿Cómo? Mediante una buena formación por nuestra parte, y expresando en publico, siempre que haya ocasión, nuestras creencias católicas por escrito y de palabra, acompañando a este testimonio el de la coherencia de vida con lo que decimos y pensamos.
LA FE DEL CARBONERO: Hoy ya no vale la fe del carbonero, aquel que decía que el creía lo que creía la Iglesia, y cuando se le preguntaba que qué creía la Iglesia respondía que lo mismo que creía él, y no sabia dar más razones de su fe. De esta fe ha dicho el Papa actual que no es la fe que quiere la Iglesia, ni a la que debe aspirar el cristiano, ni la que admite la sociedad de hoy
¿DONDE EJERCER NUESTRO APOSTOLADO? En nuestro entorno social y familiar. El entorno social normalmente está entre los mayores, con unas ideas y una formación similar a la nuestra, y el entorno familiar se desarrolla con los hijos y los nietos, que normalmente tienen una formación y una manera de entender la vida muy diferente a la nuestra, y conviene resaltar esto, porque esto nos obliga a los mayores a salir de las sacristías, donde vivimos muy cómodamente, a palpar el mundo actual y a hacer un esfuerzo permanente para estar preparados para hacer también el apostolado que requiere la sociedad de hoy, la que viven nuestros hijos y nuestros nietos.
PROPONGO: En vista de esto propongo tratar este mes el siguiente tema:
¿Creéis que los mayores podemos y debemos hacer algo por mejorar esa idea equivocada que hoy tienen muchos respecto a Dios? ¿Qué podemos hacer?
Creo que sería bueno empezar por exponer cada uno cual es nuestra idea sobre Dios, para aclararnos entre nosotros, pues es muy probable que cada uno tengamos una idea diferente. Si alguien quiere tratar otro tema puede proponerlo y se tendrá en cuenta.

6 comentarios:

jehercri dijo...

Como veo que nadie se ha lanzado todavía a hacer comentarios sobre el apostolado, tema interesante para nosotros, voy a ampliar el tema con dos ejemplos sacados de la vida real, un poco cambiados para que nadie se sienta molesto por alusiones. A ver que os parecen.
Primer caso. Tres estudiantes de medicina son muy amigos. Pepe se define como creyente practicante, y da ejemplo como tal. Pepito se define como humanista, y obra como lo dice ser. Juan se define como creyente muy poco practicante. Entre ellos nunca hablan de Dios. Terminan la carrera y Pepe y Pepito se apuntan a médicos sin fronteras, el primero impulsado por su fe y el segundo por su humanismo. Juan se queda en su ciudad. Un día, de los pocos que va a misa, se pregunta: ¿Bueno, y qué estoy haciendo yo aquí? Y se responde: Vengo para salvar mi alma, pero si hay un Dios justo como cree Pepe, ese Dios no puede condenar a una buena persona como es Pepito, aunque no vaya a misa. Y sigue razonando: luego ni para ser buena persona ni para salvarme es necesario venir a misa. Y deja de ir a misa. Mi pregunta: ¿Por qué a Juan le ha convencido más el ejemplo de humanismo de Pepito que el proceder de Pepe, que es incluso más humano que el de Pepito? ¿Qué le ha faltado, si es que le ha faltado algo, al apostolado de Pepe?
Segundo caso. María es una mujer muy de Iglesia y tiene un hijo al que en su día intentó inculcar su religión. Es muy devota de San Antonio porque le encuentra lo que pierde, y de la Virgen del Pepertuo Socorro, a la que todos los días pide por la salud de los suyos, y no falta nunca a sus novenas. Siempre que ella o su hijo cogen el coche, reza la oración de san Cristóbal. Aparte de unas cuantas devociones más, siempre sale de casa con el pie derecho, y hace la señal de la cruz, porque dice que eso le da buena suerte, y cuando tiene que tratar algún asunto importante se pone siempre la pulsera con un colgante especial que dice que le da buena suerte.
Su hijo, Pedro, viendo todo esto en su madre, ha llegado a la conclusión que nada de lo que hace tiene sentido, y que tanto la misa, como las devociones, como las supersticiones son obra de su ignorancia, y del lavado del lavado de cerebro que le hicieron a su madre los curas y sus padres cuando era pequeña. Ahora Pedro tiene un hijo pequeño y no consiente que nadie le hable de Dios para evitarle ese lavado de cerebro que, piensa él, le hicieron a su madre.
En el mundo en el que yo me muevo hay muchos Juanes que siguen el humanismo de Pepito, y pocos que sigan el proceder de Pepe, que a mi entender de creyente es mas correcto que el otro. Igualmente veo muchas Marías practicando la fe del carbonero y queriendo, de buena fe, educar a sus hijos y nietos en esa fe que no distingue entre religion y supersticion, y veo muchos Pedros que carecen de una visión clara de Dios, de Cristo y de su Iglesia, y no quieren seguir el ejemplo de las Marías, que es lo único que ven de religión, porque la Iglesia ni la pisan.
La pregunta que hago ahora es: Nosotros, los mayores de Vida Ascendente , ¿debemos dedicar algún tiempo a prepararnos para actuar entre estas gentes, o eso no es cosa nuestra? ¿El apostolado debe hacerse para todos de la misma forma, o en ambientes diferentes debe practicarse de forma diferente? ¿Basta con el apostolado de buen ejemplo, como el de Pepe con sus amigos, que ninguno de ellos le siguió?

FELIX dijo...

El tema que propones "Sobre el Apostolado en Vida Ascendente", me parece especialmente interesante. Y sobre ello dices que: "Consideras que urge recuperar la imagen de Dios, de Cristo y de su Iglesia, mediante una buena formación para poder expresar en público nuestras creencias católicas con el testimonio de la coherencia de vida...
Estando de acuerdo con tus apreciaciones, a mí, que me gusta designar al Apostolado como: compromiso apostólico, me permitiría añadir que, a nivel de nuestro Movimiento, el Apostolado debe plasmarse sobre todo en eso: ser responsable, especialmente si se desempeña un cargo de cierta representatividad, que nos obliga a dar ejemplo del compromiso adquirido y de coherencia para poder ser un espejo en el que se puedan mirar y tomar ejemplo los miembros que de algún modo comparten con nosotros su caminar por esta etapa de nuestra vida. Porque amigos: Obras son amores...lo demás pueden ser muy buenos propósitos, pero a lo mejor andamos un tanto por las nubes y no "aterrizamos".
No olvidemos que sus proyectos no son los nuestros y nuestros caminos no son los suyos.
Practiquemos un Apostolado más sencillo, de andar por casa, pero más lleno de sentido de auténtico compromiso apostólico.
Un abrazo.
Félix

jehercri dijo...

COMO PUBLICAR COMENTARIOS

Me dicen algunos que tienen dificultades para publicar su comentario. Los pasos a seguir son estos:
A leer los comentarios se llega pinchando en comentarios, al final del tema del mes.
Si estáis viendo ya los comentarios veréis que al final dice. Haga su comentarios; se hace escribiéndolo en el recuadro correspondiente.
Después se elige una identidad, por ejemplo anónimo. Si quieres poner tu nombre, (aconsejable para entendernos mejor), pinchas donde dice URL y pones tu nombre.
Hecho todo eso sale PUBLICAR O VISTA. Si pinchas en publicar te da la opción de corregir, pero no lo publica; para que lo publique tienes que volver a PUBICAR y pinchar aquí. Cuando pinchas en PUBLICAR es cuando lo publica, (si no sobrepasa los 4096 bytes) y saldrá un mensaje diciéndote que lo ha publicado.

Si quieres hacerlo mas cómodo me mandas el comentario por correo (Jehercri2@gmail.com) , y yo te lo pongo en comentarios para ayuda de todos.

jehercri dijo...

No estaría bien que pidiera vuestra colaboración y que me quedase sin aportar la mía. Así es que ahí va también mi opinión sobre el tema.
Para mí, el apostolado consiste en anunciar el reino de Dios con la palabra y con el ejemplo. Pienso que el apostolado de la palabra sin el ejemplo queda cojo, pero creo igualmente que el apostolado del ejemplo sin la palabra queda aún más cojo. Dar buen ejemplo sin explicar la Palabra puede quedar reducido a puro humanitarismo. Eso también lo hacen los ateos. Por otra parte, limitarnos a conocer la palabra para cumplirla nosotros no es cumplir el mandato de Cristo de Id y anunciad la Buena Nueva a todo el mundo. Anunciar la Palabra implica prepararnos bien para saber qué anunciar y cómo anunciarlo.
Ya sabemos que existen muchas formas de apostolado –apostolado de la oración, de ayuda al prójimo, de formación etc.etc.- y en cada una de esas formas se puede hacer buen apostolado, pero eso no nos libera de la obligación de anunciar la Palabra por medio de la palabra . Con la palabra enseñaba Cristo a los apóstoles, y con la palabra enseñaron los apóstoles a los primeros cristianos. No trato con esto de quitar importancia al ejemplo (gran maestro es fray ejemplo), lo que quiero resaltar es la importancia de anunciar el Reino de Dios con la palabra.
QUE TENEMOS QUE ANUNCIAR? La fe que profesamos. Que creemos en Dios Padre, todo poderoso, sabio y justo, principio y fin de todas las cosas y creador de todo cuanto existe. Que creemos en Jesucristo su único Hijo, que murió en la Cruz por redimirnos de nuestros pecados, y que resucitó de entre los muertos con una naturaleza diferente a la que tenía antes de morir, y que por eso creemos en la otra vida, donde se premiara el bien que hayamos hecho y se castigará el mal. Tenemos que anunciar que creemos en el Espíritu Santo, que iluminó y fortaleció a los apóstoles, y que sigue iluminando y fortaleciendo a la Iglesia, en la cual creemos también como algo querido por Cristo para guía y ayuda de nuestra salvación.
¿COMO ANUNCIAR TODO ESTO? Con palabras y acciones creíbles y entendibles por aquellos a quienes nos dirigimos. Para que sean creíbles deberemos ser capaces de dar alguna explicación lógica de por que creemos lo que decimos creer (creo que aquí fallamos muchos), y para que sean entendibles tenemos que anunciarlo con un lenguaje llano y propio de nuestros tiempo, no con el de los santos y místicos de otras épocas. Deberán ser palabras que entendiéndolas la cabeza lleguen hasta el corazón para que cabeza y corazón marchando al unísono trabajen juntas al servicio de Dios. No olvidemos lo que nos han dicho los Papas: la fe del carbonero, la fe no interiorizada con argumentos creíbles, ni es la que quiere la Iglesia ni es la que admite nuestra sociedad de hoy

Anónimo dijo...

Otra vez han desaparecido las entradas y comentarios anteriores...en fin!

jehercri dijo...

Anonimo del 23F.
El 23F hubo tiros, pero, no han desaparecido las entradas ni los comentarios, al menos en mi ordenador.
Verás que en la entrada, debajo de los comentarios, hay un enlace que dice Entradas, pincha alli y podras ver todas las entradas y los comentarios de cada entrada.