sábado, 10 de octubre de 2009

ARTICULO DE MONSEÑOR SEBASTIAN PARA COMENTARLO

TEMA 2 OCTUBRE

Este tema 2 de octubre queremos dividirlo en dos partes:
a) Comentar nuestros comentarios del tema1
b)Comentar el artículo de Monseñor Sebastian
Reproducimos a continuacion el artículo de Monseñor Sebastian

El anonimo 4 envió este articulo que dice:

"Los números a veces dan sorpresas. Veamos unos cuantos datos sobre la sociedad española actual. Disminuye el número de matrimonios. Si en 1970 se celebraron en España unos 240.000 matrimonios, en 2008 se han celebrado 190.000, y sólo un 60% de ellos han sido matrimonios religiosos. Actualmente, en una diócesis española los matrimonios civiles son más del 60%; en otras cuantas pasan del 50%. Los divorcios en el año 2000 no llegaban a 40.000. Ahora estamos en 130.000.Los núcleos familiares se han reducido drásticamente. El 44% de los matrimonios no tienen hijos. El 43% tienen 1 ó 2 hijos. Solamente el 4% de los matrimonios tiene 3 o más hijos. Los abortos han crecido de 40.000 en el año 1991 a 112.000 en 2007; casi el 70% de las madres que abortan son solteras.Decididamente, ésta es otra España. Si un 40% de los que se casan, se casan por lo civil, y otros muchos no se casan, hemos de pensar que, al menos el 50% de la población española prescinde institucionalmente de la Iglesia de manera consciente y estable. ¿Qué educación cristiana pueden tener los hijos de estos matrimonios? ¿Podemos seguir bautizándolos como hacemos con los hijos de los cristianos practicantes? Si los hijos de madre española casada son la mitad que hace 30 años, si casi la totalidad son hijos únicos o con un solo hermano, y si sólo la mitad son fruto de un matrimonio religioso, ¿qué posibilidades tenemos de que surjan vocaciones para la vida sacerdotal o consagrada?De estos datos brotan dos conclusiones difícilmente cuestionables: 1ª, los católicos españoles tenemos que tomar conciencia de que en el conjunto de nuestra sociedad somos minoría. Tenemos que aprender a vivir como una minoría significativa, bien trabada, responsable y activa. Es conveniente clarificar las diferencias e intensificar el respeto y la convivencia. 2ª, Necesitamos cambiar la tendencia y comenzar a ser una Iglesia decididamente misionera, una Iglesia minoritaria que trata de convencer y ganar personas nuevas".
4 de octubre de 2009 22:20
Se piden comentarios a esta aportacion

10 comentarios:

jehercri dijo...

COMENTARIO A NUESTROS COMENTARIOS DE OCTUBRE 2009

Empiezo yo haciendo comentarios a los comentarios recibidos, y espero que me secundéis en esto . Mi agradecimiento a todos los que habéis colaborado. Espero también que nadie se sienta ofendido con las discrepancias que puedan originarse. Creo que en esto está nuestro enriquecimiento.
Agradezco a todos vuestras colaboración, y advierto, para evitar errores de interpretación, que a veces al poner alguna objeción a vuestros comentarios no es necesariamente porque disienta de lo que decís, puede ser simplemente para expresar opiniones distintas con las que podemos encontrarnos al hacer nuestro apostolado, y quiero llamar la atención sobre ello para estar sobre aviso.

Comentario del anónimo del 29-9- a las 11,59

Dices que tenemos que respetar la voluntad de los padres en la educación de sus hijos. Por supuesto, están en su derecho de dar a sus hijos la educación que crean oportuna. Pero creo que nosotros estamos en nuestro derecho de manifestar libremente nuestras creencias, aun delante de los hijos que tienen padres que no creen., y te pregunto: Cuando esos nietos nos pregunten ¿por qué vas a misa si mi papá dice que no vale para nada?, o ¿tu crees que hay Dios? qué le respondemos, que es lo que le enseñan sus padres o que yo no estoy de acuerdo con lo que su padre dice? Y si le decimos que nosotros pensamos de forma diferente a sus padres, alguna explicación tendremos que darle digo yo, ¿o no?. Si le digo que creo que hay Dios tendré que decirle por que eso. ¿O debemos dar callada por respuesta? ¿O es mejor contarle un cuento y salirnos por la tangente? ¿Cuál crees tu que es la mejor solución de todas estas? O sugieres alguna otra?

Dices también: Los que vamos a la Iglesia (incluidos los curas) tampoco comprendemos la forma de obrar de Dios, y sin embargo seguimos yendo y creyendo. De esto parece que tu deduces que los que dejan de ir a la Iglesia no es por que no comprenda a Dios. Puede que tengas razón, pero yo sigo creyendo que hay muchos que abandonan la fe porque no tienen claro el concepto de Dios. Tu y yo tenemos claro que tenemos que aceptar a un Dios que no comprendemos, porque esto nos parece lo lógico, pero mi experiencia me dice que hay mucha gente que no está dispuesta a admitir a un Dios que le parece injusto, precisamente porque no comprenden su forma de obrar. ¿Tu no crees que sucede esto?

Finalmente dices que tal vez sea más honesto para nosotros hacer mas hincapié en madurar y comprender la razón de nuestra fe que en transmitir nuestras creencias. Personalmente pienso que las dos cosas son necesarias, pero estoy de acuerdo que sin la primera la segunda pierde toda su eficacia.

Comentario al anónimo del 29-9 a las 20,10

Preguntas: ¿Debemos ser más católicos o más cristianos? Y yo te pregunto ¿Acaso hay catolicismo sin cristianismo? Ya sabemos que hay cristianos que no pertenecen a la Iglesia de Roma, pero ¿tu conoces católicos que no sean cristianos? Por otra parte no entiendo muy bien tu referencia a la expulsión de los mercaderes del Templo. Y estoy de acuerdo contigo que el fin del apostolado no es conseguir mas influencia en la sociedad, pero sigo pensamos, a lo mejor equivocadamente, que un catolicismos que no es capaz de influir en su entorno social está condenado a desaparecer como motor de la vida de la sociedad y del individuo, aunque sigan practicándose sus rutinarias tradiciones religiosas. No se si compartirás este pensamiento.

jehercri dijo...

COMENTARIO AL ARTICULO DE MONSEÑOR SEBASTIÁN

Mi comentario a las ideas expuestas en este artículo es el siguiente:

Creo que podemos sacar tres conclusiones que son:

a) La mayoría de los españoles prescinden hoy de la Iglesia de forma consciente y estable. No podemos decir que todos abandonan la Iglesia por apatía, o dejadez religiosa, muchos la abandonan porque no les convence lo que ven en ella, bien en la jerarquía, bien en los creyentes de a pie, o bien en las dos partes. Esto debe ser motivo de reflexión: ¿Qué no estamos haciendo bien? ¿Somos incoherentes? ¿No convence la doctrina que predicamos, o no convencen nuestros comportamientos? ¿O no sabemos dar razones lógicas y convincentes de nuestra fe?

b) Tenemos que aprender a convivir con los que no piensan como católicos, aunque estén dentro de nuestra familia. Este convivir, pienso yo, debe permitir que las dos partes puedan expresar libremente sus convicciones. Las dos partes, no solamente los que no creen. A los cristianos (católicos o no) a veces intentan callarnos con la amenaza de intolerantes, o antidemocráticos, o nos callamos por temor a que se nos considere carcas o de creencias obsoletas. Creo que debemos estar preparados para dar respuestas a estas o parecidas objeciones que exponen para no escucharnos.

c) Tenemos que cambiar nuestra forma de hacer apostolado, pasando de un apostolado entre creyentes a un apostolado con no creyentes. Creo que a esto se refiere monseñor cuando dice: “Necesitamos cambiar la tendencia y comenzar a ser una iglesia misionera”. Y yo pregunto: ¿Estamos preparados para esto? ¿Sabemos qué diferencia hay entre el apostolado que venimos haciendo y el apostolado para una sociedad de no creyentes? ¿ Se nos está preparando para esto?

Me gustaría ver comentarios sobre este punto.

orencio dijo...

Jehercri, creo que eres un poco pesimista y un poco radical en cuanto a la interpretación del articulo de Monseñor Sebastián.
Dice este Obispo que la mayoría de los españoles no son creyentes. Tal vez ocurra esto entre los jóvenes, pero no creo que sea así en los mayores, entre los que nos encontramos los de Vida Ascendente. Y yo te pregunto, ¿nosotros donde tenemos que hacer apostolado, entre los mayores o entre los jóvenes? No veo por que tengamos que cambiar nuestra forma de hacer apostolado a nuestros años. ¿Qué otro apostolado podemos hacer a nuestra edad mas que explicar el Evangelio, cumplir con los mandamientos de la Santa Madre Iglesia y dar buen ejemplo a nuestro nietos?
Por otra parte parece que piensas que somos los culpables de que la gente se haya apartado de la Iglesia. ¿De veras piensas eso? ¿Acaso no hemos intentado enseñarles la religión y darle buen ejemplo a nuestros hijos? ¿No habrán sido factores ajenos a nosotros (colegios, el ambiente social, los medios de comunicación etc) los que hayan influido para que los jóvenes no practiquen la religión?. Espero me contestes a esto.

Anónimo dijo...

Orencio,
me temo que Jehercri tiene razón.

¿De que sirve el apostolado entre los creyentes? ¿De que sirve abonar un pequeño terreno rico cuando hay eriales inmensos que nos rodean?

El problema es que la labor se presenta titánica y ya somos pocos y débiles.

Los dos mil años pasados en que nuestra cultura ha dominado en estas tierras las ha dejado como son ahora.

Solamente hay que asomarse a las afueras de nuestros pueblos castellanos para ver en que se han convertido aquellos bosques frondosos que una ardilla podía cruzar sin tocar el suelo.

Me temo que las hemos esquilmado sin remedio y que el desierto acabará tragándoselo todo como dicen los científicos que ocurrirá.
Los campanarios son como islas en el océano.

Puedes forzar que crezca la espiga durante mucho tiempo y, cosecharla una y otra vez en el mismo suelo pero al final verás que se necesitaban los pájaros que expulsaste y los árboles que arrancaste y las piedras que quitaste del suelo; y las águilas, y los lobos...

Me temo que tendríamos que revisar a fondo si las cosas se hicieron bien, si siguen valiendo las mismas ideas, si en vista de los resultados, alguna vez fueron buenas...

Seguro que en su momento, y para lo que entonces pretendian algunos lo eran, pero parece que solo lo eran para ellos y que solo en aquel momento...

Aquellos recogieron sus cosechas, nos dejaron lo que tenemos y nos enseñaro que así debía ser para siempre.

Si, hemos intentado enseñarles a nuestros hijos la religión. Pero me temo que a ciegas.

Nos tocó vivir en un mundo en el que importaba más lo que parecía que lo que de verdad era.

Importaban los ritos, las costumbres y, sobre todo, lo que se veía, y llegamos a creer que, aquello que parecía que importaba, era lo que realmente importaba. Y me temo que eso fué lo que tratamos de enseñar a los nuestros y que creíamos que les estábamos enseñando la religión.

Nunca nos planteamos que lo que debíamos transmitir era solamente un mensaje de amor. ¡Ay, si nos hubieramos limitado a eso!...Como dicen en mi pueblo: ¡Otro gallo nos hubiera cantado!

Y resulta que eso, y solamente eso, era lo que Jesucristo nos pedía... ¡Solo hay que leer el libro!

Me consuela darme cuenta ahora de que no fué del todo culpa nuestra.
Nos enseñaron así. Nos plantaron, nos cosecharon...

Eran tiempos duros y nosotros éramos espigas en el granero.

Anónimo dijo...

Orencio,
claro que han sido factores ajenos a nosotros los que han influido también en nuestros hijos. Claro, los colegios, los medios de comunicación, el resto de la gente...
Tiene que ser así porque el mundo que les ha tocado vivir no es el mismo que nos tocó a nosotros. Sus problemas no son como los nuestros y sus soluciones no pueden ser como las nuestras.

Hablo de nuestros hijos. ¡Imagínate cuan más lejos que está el mundo de nuestros nietos! Antes las cosas iban despacio, pero ahora...En los últimos veinte años han cambiado las cosas más que en los cien anteriores.

Para que los colegios, los medios de comunicación o el ambiente social no hubiera tenido esa influencia perturbadora que comentas en nuestros hijos, tendría que haberse mantenido congelada en el pasado. ¿Crees que hubiera sido bueno? ¿Para quien?

Nosotros, como dice el otro Anónimo, podíamos haber trasmitido amor y cariño a los nuestros y fomentado que eso continuase, generación tras generación, sin tratar de encorsetarlos a todos en el mismo molde en que nos metieron a nosotros.

Un saludo.

jehercri dijo...

Contestación a Orencio:

Querido amigo: En tu comentario haces algunas preguntas y me pides que las conteste. Intentaré hacerlo, no sin antes advertirte que mis opiniones no son las de un experto en la materia, por lo que las tuyas, o las de cualquier otro, pueden ser más acertadas que las mías.
Preguntas ¿dónde tenemos que hacer apostolado, entre los mayores o entre los jóvenes? Mi respuesta es: Allí donde nos encontremos, especialmente en nuestro entorno familiar y social, donde con toda seguridad habrá niños, jóvenes y mayores. Sé que nuestros Estatutos dicen que el objetivo de Vida Ascendente es llevar y fomentar el mensaje evangélico a los jubilados y mayores, pero, pienso yo, que como cristianos tenemos que llevar el evangelio a todas las gentes, aunque nuestro objetivo preferente sea el de los mayores, porque se supone que éste es nuestro entorno más habitual. .
Preguntas también: ¿Acaso no hemos enseñado la religión a nuestros hijos? Y yo, a la gallega, repregunto ¿Le hemos enseñado lo que ellos necesitaban saber para vivir en la sociedad que le toca vivir su vida (que no es la nuestra)? Te responderé con algunos ejemplos: Nuestros padres labradores -los míos eran labradores- nos enseñaron a trabajar la tierra con el arado romano, y a recoger la mies con la hoz. ¿Crees que si yo hubiera sido labrador podría haber enseñado a mis hijos lo que mis padres me enseñaron a mí? ¿De qué le hubiera servido hoy eso cuando todo se hace con las máquinas? Sustituye, si quieres, al padre labrador por un padre médico. ¿Crees que el médico de los años 50 ó 60, cuando apenas existían las analíticas y los diagnósticos por imagen (radiografías, tomografías, mamografías etc. etc.) podría enseñar a su hijo sus métodos de curación? Aplica el cuento a la religión.
Tal vez seas de los que dicen que el Evangelio no cambia, y que Dios es siempre el mismo en todos los tiempos. Cierto, pero las religiones, incluida la cristiana, no se han entendido igual en todas las épocas de la vida. Se adaptan a los tiempos para mejor servir a los hombres. Repasa, aunque sea someramente, la historia del cristianismo, y verás que en un principio los cristianos vivían en comunidades de bienes, y les estaba prohibido ir a la guerra. Cuando las cruzadas ya no se vivía en comunidades de bienes, y los Papas llamaban a los cristianos a la guerra y bendecían a los que iban a ella. Cuando la Inquisición la Iglesia quemaba –por considerarlos herejes- a los cristianos de disentían de lo que la jerarquía eclesiástica creía, hoy se nos pide tolerancia con los “herejes”. Durante varios siglos varios Papas condenaron la libertad de prensa y de expresión por ser cosa del diablo, según el decir de algún Papa. Los Papas actuales están pidiendo a voz en grito la libertad de expresión. La sexualidad y los anticonceptivos (grave problema de hoy que aparta a mucha gente de la Iglesia) no se entienden en la actualidad como nos lo enseñaron a nosotros hace cincuenta años.
¿Ves ahora por qué en mi comentario anterior me muestro partidario del cambio que propone Monseñor Sebastián, para caminar a tono con las circunstancias del momento actual?
La Iglesia siempre ha tenido enemigos, y siempre le ha plantado cara refutando sus argumentos. Hoy el enemigo es laicismo empeñado en erradicar a Dios y a la religión de la
sociedad actual, y, pienso yo, que todos los cristianos debemos formarnos para estar a su nivel cultural –que no es bajo- y poder plantarle cara.
Con afecto, Jehercri

Anónimo dijo...

¿Por qué han desaparecido las entradas y comentarios del mes anterior del archivo? Yo al menos ya no los veo. Los comentarios a entradas u otros comentarios anteriores no se siguen bien si se van eliminando aquellos. Se supone que en un blog (libro de bitácora) van quedando "registradas" las opiniones del propietario y los comentarios de los que lo siguen. Esa es su razón de ser. Para otros estilos de comunicación hay otros medios.

jehercri dijo...

Contestacion al anónimo del 30 de Octubre

Como bien puedes suponer las entradas y los comentarios anteriores han desaparecido porque han sido eliminadas intencionadamente por mí.
Mi propósito es centrarnos cada mes en un tema determinado, y que los meses anteriores no sirvan de distraccion al mes actual. Las entradas y los comentarios guardados estan en archivos aparte, y con mucho gusto os los puedo facilitar a quienes esteis interesados en ellos. De hecho pienso ofrecerlos al terminar el curso. Si crees que hay algun medio mejor para ponernos en comunicacion (aparte de la videoconferencia, que creo es pronto para que nosotros empecemos a usarla, -todo se andará si Dios quiere-) puedes proponerlo, que yo estoy siempre abierto a lo que parezca mejor. Gracias por tu sugerencia, y ya aprovecho para comunicarte que el proximo dia 5 habrá cambio de tema, y que el proximo promete ser muy interesante para todos nosotros.

Anónimo dijo...

Bueno, jehercri, si ese es el método que te parece bien,...bien está, pero entonces, no tiene mucho sentido hacer comentarios a los comentarios de entradas anteriores...
¡que no nos enteramos hombre!
Saludos

jehercri dijo...

Hola, anónimo del 4 de noviembre.
Tienes razon cuando dices que no tiene sentido hacer comentarios a comentarios anteriores si éstos no se pueden ver.
Este tipo de comentarios los hice en esta segunda entrada porque la primera estuvo poco tiempo y quería recoger algo de lo que allí se dijo. No creo que este hecho vuelva a tener lugar. Pero si a ti te gusta que permanezcan las entradas y sus comentarios, y puesto que hasta ahora nadie dice nada en contra, y a mi me cuesta menos dejarlos que quitarlos, a partir de ahora voy a dejar todo lo que se diga en el blog, sin perjuicio de que más adelante, si nadie los consulta, se vuelvan a borrar en bien de la claridad de fijar la atencion principalamente en el tema del mes.
Aprovecho para decirte que el próximo domingo habrá entrada nueva con el título Vida Ascendente de Salamanca tiene problemas y pide ayuda a sus compañeros. Espero que si eres uno de los nuestros aportes tus sugerencias. Otra vez gracias por tu participación